Luis Jijón León/NOTYMAS
Chilpancingo, Gro., abril de 2016.- Personas que eran levantadas por
integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos, eran trasladadas en una ambulancia
de la Cruz Roja hasta una casa de seguridad en Taxco, donde eran torturados,
bajo la complicidad de los Policías Municipales.
El grupo delictivo Guerreros Unidos es señalado por la
desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en septiembre del 2014 con la
participación de elementos municipales de Iguala y de Huitzuco, según el
informe dado a conocer por la CNDH el pasado jueves.
Sin embargo, también mantenían el control de los elementos
municipales en Taxco, así lo denunció el ex soldado estadounidense James
Wooden, quien fue detenido y golpeado por elementos preventivos al mando de los
Guerreros Unidos.
Wooden, narró al periódico El País, que la tarde del 28 de
abril del 2013, policías municipales de Taxco irrumpieron en su taller ubicado
en la comunidad El Arroyo, para luego golpearlo y llevarlo a la comandancia,
donde lo siguieron torturando.
La detención fue por órdenes de sus vecinos, quienes en
repetidas ocasiones le habían hecho saber que eran integrantes del grupo
delictivo Guerreros Unidos.
Narró que, esa tarde del 28 de abril una de sus vecinas le gritó
que quitara su camioneta de la puerta de su casa. Minutos después salió su
hermano de ésta de nombre Raúl Flores Arizmendi, quien con machete en mano le
advirtió: “te vamos a mandar de regreso a Estados Unidos en pedazos si no
mueves el coche”. Quien además le dijo que formaba parte de los Guerreros
Unidos.
Minutos después del incidente, dos patrullas de la policía
municipal con seis elementos irrumpieron en su taller, donde fue golpeado para luego
ser llevado al cuartel de policía donde lo siguieron torturando.
Wooden, narró, que fue testigo de las actividades de
sus vecinos, pues dicha vivienda estaba habilitada como una casa de seguridad
de los Guerreros Unidos y presenció en varias ocasiones como una ambulancia de
la Cruz Roja llegaba por la madrugada a la casa, entraba a la cochera para
luego bajar a golpes a los pasajeros. “eran jóvenes, venían a las dos o a las
tres de la mañana y los bajaban a golpes. Yo escuché sus voces”.
De acuerdo a la investigación de la Procuraduría General
de la República (PGR), elementos de la Policía Municipal de Iguala, conformaron
el grupo denominado “Los Bélicos” y se dedicaban al secuestro y ejecuciones, en
el cual participaban elementos de bomberos y Protección Civil, quienes
utilizaban las unidades oficiales para transportar droga y personas a las que
privaban de su libertad, todos bajo las órdenes del grupo delincuencia
Guerreros Unidos, lo cual coincide con el relato de Wooden.
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